Nuevamente y como pasó últimamente (con este van a ser siete laudos consecutivos), el precio de la yerba no se va a fijar en nuestra zona, vamos a depender de funcionarios de Buenos Aires (Secretaria de Agricultura de la Nación).
Las irreconciliables diferencias de precios para la hoja verde y la canchada, ofrecidos por compradores y vendedores seguramente son excusas reales y lo expresamos en una nota anterior ver: (https://lavozdisruptiva.com/index.php/2023/09/15/sin-acuerdo-por-el-precio-de-la-yerba/), aunque también evidencia una falta alarmante en el manejo de las negociaciones.
Se prefirió la confrontación, que sirvió de muy poco para consensuar precios en una economía que con la inflación desbocada pulveriza cualquier acuerdo,hace perder noción de los precios relativos y perder criterios de razonabilidad para discernir si un precio es bueno o malo. Un precio puede ser muy bueno -como se lo consideró y festejó en el último laudo- pero pierde valor muy rápidamente.
El problema entonces es la inflación y quienes son responsables de la misma, y hasta que no se la ataque efectivamente y con determinación vamos a seguir con los pedidos desmesurados de cada sector, que en definitiva lo que hacen es proteger cada uno su negocio y la fuente de sus ingresos.
Las posiciones
Las negociaciones se estiraron mas de la cuenta, si no había acuerdo la ley ya establecía que a principios de este mes de setiembre se debía enviar a laudo de la Nación para que la Secretaría de Agricultura se tomara todo este mes para evaluar la situación y definir un precio que debe regir desde el 1 de Octubre .
Las posiciones eran muy dispares y miembros del Directorio del INYM consideraban muy difícil acordar. El propio Presidente del INYM en declaraciones a Misiones On Line reconoció la semana pasada “que nota una gran predisposición para lograr un consenso por parte de las partes, pero por supuesto la situación económica nacional es un gran impedimento que no está ayudando a que se fije un precio específico. Y dejó en claro que si bien el objetivo principal es llegar a un acuerdo entre toda la cadena y que no vaya a laudo; no será en detrimento de nadie”. Prosiguió afirmando: “Queremos un acuerdo beneficioso para todos los sectores. Partiendo de la base, el precio justo tiene que ser la grilla de costos más un margen de ganancia. Siempre vamos a buscar el acuerdo, pero teniendo presente que el productor debe tener un precio justo, un precio que le garantice vivir dignamente”, sostuvo Szychowski.
El último laudo había sido en marzo. En ese momento, el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, laudó un precio a pedido de la producción, con una modalidad escalonada, que lo elevó al final a los 120 pesos por kilo de hoja verde, que es el que rige hasta el 1 de octubre. Con el desorden económico los 120 pesos quedaron en la historia y por mas que el precio fijado fue de 120, el “mercado” (o sea el precio libre no regulado) está hoy pagando mucho mas, 140 comentan y aún 150 $ el kilo de hoja verde.
El laudo en la campaña de Massa
Las demoras del envío a laudo sirvió para la campaña de Sergio Massa, que opinó de la yerba en su visita del lunes pasado a Posadas destacando “Que el aumento anterior fue incluso superior a lo que pretendían los productores”, refiriéndose a el laudo vigente y avanzando un poco mas dijo ”Es el semestre más alto de valor real y el de mayor consumo histórico de la yerba mate. Se le cayeron todos los argumentos a aquellos que quisieron imponer miedo.”
Y ya refiriéndosé a la situación -en ese momento hipotética- de tener que llegar a un laudo de la Nación adelantó “Vamos a defender el trabajo de cada productor. El Estado protege al más débil, porque si queda librado a la fuerza del mercado, queda a la buena de Dios. Vamos a imponer la fuerza del Estado para garantizar que el producto valga”.
Ahora para saber el precio de la yerba debemos esperar la resolución de los funcionarios de Buenos Aires.
