El misionero que apuesta a la economía circular mediante la implementación de un método importado de Estados Unidos para reutilizar el pelo humano y animal desechado con el objetivo de convertirlos en productos circulares. Se trata de alfombras de pelo que reducen el uso de agua de riego a la mitad, entre otros beneficios que darán un gran impulso al desarrollo provincial.
El dato resulta llamativo, pero se calcula que en Argentina se generan aproximadamente 1.382 toneladas al mes de pelo residual, considerando solamente el pelo humano.
Al no considerar un tratamiento diferenciado para una segunda vida útil, el pelo desechado de las peluquerías termina generalmente en relleno sanitario, lo que genera gases de efecto invernadero y contamina el ambiente. Esto fue lo que llamó la atención de Nicolás Elizalde fundador de ECOPELO MISIONES, para tomar la decisión de contactarse con la Fundación Matter Of Trust y comenzar a trabajar en este innovador proyecto.
La idea de reciclar el pelo resulta curiosos, pero es una realidad. El pelo posee características biológicas que le brindan diferentes beneficios, lo cual hacen que sea totalmente reciclable para finalmente darle múltiples funciones. En la agricultura, por ejemplo, puede disminuir hasta 50% el uso de agua de riego, ayudando también a combatir las sequías; mientras que por sus características absorbentes, permite contener y combatir derrames de petróleo en ríos y arroyos (según un estudio de la NASA, medio kilogramo de pelo tiene la capacidad de absorber 3,8 litros de aceite en solo dos minutos).
Esta iniciativa se propuso ECOPELO MISIONES para crear la primera red de recolección y valorización de pelo residual de la provincia, al implementar la idea extranjera para dar soluciones locales a problemas locales. Por un lado reutilizar un desecho, usando el pelo de la propia región y beneficiar a nuestro territorio, evitando así la contaminación del ambiente; y posteriormente reinsertarlo como productos sustentables que proponen un impacto positivo a los productores locales, considerando que la provincia apuesta fuertemente a la producción sustentable y orgánica.
De desecho a materia prima
El proceso de reciclaje consiste, en primera instancia en la recolección del pelo donado de las peluquerías, luego pasa por un proceso de clasificación y limpieza (el proceso es manual, sin el uso de químicos ni agua). Finalmente, pasa por la tecnología de una máquina punzonadora con agujas que entrelaza las fibras de pelo y lo hace más compacto, creando una alfombra rígida.
Un desafío muy importante es generar concientización sobre el reciclaje para impulsar estas acciones. Por esta razón ECOPELO MISIONES invita a que peluqueros y veterinarios puedan adherirse al proyecto a partir de la donación del pelo residual que generan. Además, la empresa destaca la importancia de generar sinergias con el sector provincial en la promoción de actividades regionales relacionadas al cambio climático.
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