Los valores se conocerán a partir del 1 de abril con actualizaciones mensuales, con el solo efecto de orientar a los productores.
Después de tres reuniones donde no pudieron conseguir quórum para acordar precios, tal como establecía la ley de creación del INYM, el directorio del Instituto determinó el pasado jueves 21 armar una pizarra propia con precios de referencia para hoja verde y yerba canchada para que los productores tengan como manejarse y puedan pactar con los compradores mejores condiciones comerciales.
El Decreto 70/23
Hubo varias idas y venidas que se dieron últimamente, todas desde posiciones de extrema debilidad del Directorio, debido a que el Decreto 70/23 desarrolló un proceso fáctico de siete pasos a saber:
- 1-Ideológicamente demolió el concepto de “procurar la sustentabilidad de los distintos sectores involucrados en la actividad” al sacar ese párrafo de la ley original.
- 2-Eliminó la obligatoriedad de registrarse a todos los operadores que participan de la actividad.
- 3-Suprimió el mandato de acordar semestralmente en reunión de Directorio, el precio de la materia prima (hoja verde y yerba canchada) y obligar a laudar los nuevos precios a la Secretaria de Agricultura (por lo tanto al Gobierno Nacional) en caso que no se hubiera llegado a un acuerdo unánime de los mismos.
- 4-Eliminó la posibilidad de establecer medidas de regulación de plantaciones “si fuera necesario” a los fines de lograr un equilibrio entre la oferta y la demanda.
- 5-Suprimió la norma que le permitía al INYM constituir fondos específicos administrados por el propio organismo.
- 6-Redujo la capacidad sancionatoria en caso de determinarse comercialización de paquetes de yerba sin el estampillado vigente.
- 7-Acotó sustancialmente el manejo y disponibilidad de fondos propios del INYM comprometiendo sus futuras tareas específicas.
A toda esa confusión inicial, producto del golpe inesperado, se le sumó la demora por parte de Agricultura de la Nación de designar un nuevo presidente, se mencionaron varios candidatos pero hasta el día de hoy nada se sabe del reemplazo para cubrir la salida -juzgada por muchos como “apresurada”- de Juan José Szychowski.
El presidente “interino”
En tanto, luego de algunas escaramuzas palaciegas, aparece sorpresivamente el director Jonás Petterson, quien es designado como “interino” por el propio directorio del Instituto, para las firmas de los actos administrativos que obligatoriamente se suceden en un Instituto con obligaciones legales a cumplir, y gastos y sueldos a empleados que se deben pagar. El acto de nombramiento fue calificado jurídicamente como “de nulidad absoluta” por el -hasta ese momento Síndico de la entidad Dr. Emilio Joulia- y llamativamente luego de eso el Directorio remanente, en una decisión nunca suficientemente aclarada lo despidió.
No se suspendieron por fortuna, presentaciones pactadas del INYM en el interior como en el exterior, ni tampoco la representación del mismo en la feria de Dubai con la presencia de directores acompañantes designados a tal fin.
Mientras siguió avanzando la cosecha de verano a buen ritmo. Avanzó también el mes de febrero, normalmente usado para reuniones evaluatorias de costos y de intentos de acuerdo de precios que debían regir para la cosecha “gruesa” que se inicia el 1 de Abril y termina el 30 de setiembre.
La ausencia de Corrientes
La provincia de Corrientes interpretando la legalidad y vigencia del decreto 70, con la consiguiente poda de atribuciones al Instituto, no acudió a los encuentros con lo cual no se pudo llegar a ninguna conclusión.
Se especuló por parte del directorio “remanente” pasar directamente a pedir un laudo al gobierno nacional, cuestión que era mas objetable todavía porque hubiera sido una medida que no estaba contemplada en ninguna legislación y que no llegaría ni a considerarse por parte del Secretario.
Los precios de referencia
Llegado a este punto, el Directorio”remanente” del INYM, resolvió establecer en forma mensual, precios de referencias tanto de hoja verde como de canchada. Tal sistema, tienen pensado aplicarlo a partir del mes de abril. Representará el costo oficial sugerido por el INYM, aunque no será de carácter obligatorio como cuando se acordaba por unanimidad o terminaba siendo laudado por el gobierno nacional; ambos mecanismos, no se pueden aplicar a raíz de la vigencia del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU).
La Comisión de Estadísticas del INYM será la encargada de reunir todos los costos, como suele hacerlo desde hace años.
Los precios tendrán una actualización mensual, no semestral como hasta el momento. “Es para que el productor tenga algo de qué agarrarse”, dijo el director Petterson que no ocultó su frustración y la de muchos productores de no poder establecer con claridad los precios oficiales como se hacía hasta ahora. “Establecer precios de referencias, representará una herramienta para el sector productivo que no pude estar sin precio para la hoja verde y la canchada”, resumió.
Para Maciel, director por la provincia de Misiones, “planteamos ir por un mecanismo propio del INYM de emitir mensualmente precios de referencias tanto de hoja verde y de canchada. Esperamos poder hacerlo desde abril. Es un remiendo”, afirmó. Completó Maciel su evaluación de la situación al declarar: “lamentó que se llegue a la actual instancia, la industria se unió con la Nación contra los productores. Porque no solo le quitan poder al Inym, también permiten la importación de yerba mate y no permiten la fijación de precios”.
Los últimos precios “Oficiales”
El 27 de octubre 2023, fue la última vez que la Secretaría de Agricultura de la Nación estableció mediante un laudo (porque en la zona productora no hubo acuerdo que debería haber sido unánime) incrementos escalonados. Hasta el 30 de noviembre: $169,36 para el kilo de hoja verde y $643, 57 el kilo de yerba canchada. Del 1º de diciembre al 31 de enero de 2024: $210 y $ 798, desde el 1º de febrero al 29 de febrero: $240 y $912, y desde el 1º de marzo al 31 de marzo: $250 y $950, respectivamente.
Hay que mencionar que los precios pagados por “el mercado” fueron mayores a “los oficiales”, y hoy están en 370-380 el kilo de hoja verde, lejos aún de los pretendidos 505 por los que se hicieron últimamente movilizaciones de productores.
Una actividad desregulada
Finalmente estamos en un punto donde parece que hay un reconocimiento, “no oficial” o “implícito”, de los distintos componentes de la cadena productiva, de estar ante una actividad finalmente desregulada, donde el Inym y el Estado Nacional se han retirado de las atribuciones de fijar precios y de controlar su cumplimiento.
Queda analizar que hará el Inym dentro de esta nueva realidad, como adecuará su funcionamiento a las actividades que aún debe realizar y como coordinará las relaciones entre los grupos de interés para lograr un crecimiento armónico de la actividad.
Tareas para un futuro cercano.