Milei, y la oportunidad perdida por el fallido “vamos por todo”

Economía Nacional Política

Suena la alarma en la Casa Rosada porque el Presidente no logra repetir en algunas provincias los resultados de octubre del 2023.Los problemas en los argumentos que utiliza el Gobierno y por qué la crisis es política.

La luz roja no ha parado de encenderse desde el 7 de setiembre en la Casa Rosada, el día que una elección provincial alteró la hoja de ruta de la gestión de Javier Milei y confirmó la vulnerabilidad política que comenzó a horadar el blindaje económico dado por el descenso de la inflación, que parecía infranqueable.

El problema de los argentinos no es económico, es político diría a Clarín Juan González, un exfuncionario de Estados Unidos para la región durante la gestión de Joe Biden.

En las últimas dos semanas el dilema ha sido cómo afrontar aquél llamado de atención y las respuestas, a la vista de los resultados, suenan erróneas. Mesas políticas con los mismos nombres, construcción de una imagen presidencial a la cabeza de la crisis, anuncios sobre desplazamientos sin desplazados como ocurrió con Lule Menem y un acto a pura euforia pero sin contenido en Córdoba.

Carente de una eficaz comunicación política, el Gobierno buscó borrar las agresiones del discurso de Milei porque la sociedad comenzó a rechazarlo. Sin percibir que a veces la negación o la tergiversación de los hechos, genera el mismo rechazo.

Como cuando el Presidente culpó a los periodistas por preguntarle por los dichos desagradables del “Gordo Dan” contra Luis Juez involucrando a una de sus hijas con discapacidad. Milei retrucó por qué debía hacerse cargo de los dichos de uno de sus 12 millones de seguidores. ¿El Gordo Dan es uno más? O es un influencer que maneja un ejército digital de militantes libertarios que responde a Santiago Caputo, que ha adelantado la renuncia de funcionarios y que tiene línea directa con Milei que ha ido a su programa de streaming a charlar durante horas.

Al igual que cuando el mandatario, en Córdoba, afirmó que los audios que se le adjudican a Diego Spagnuolo hablando de una red de coimas habían sido hechos con inteligencia artificial. Pero luego se desdijo, y en una charla radial defendió haberlo desplazado porque en los audios decía cosas contra funcionarios, que no había denunciado.

También ensayó una rara defensa de las sospechas deslizadas en los audios del exdirector de ANDIS cuando habla de una red de coimas e involucra a Karina Milei en un presunto retorno del 3%. “¿Se va a quedar con el 3 por ciento cuando puede quedarse con el 100?”, dijo el Presidente.

Javier Milei durante un acto de campaña en Córdoba. Foto: Fernando de la Orden.Javier Milei durante un acto de campaña en Córdoba. Foto: Fernando de la Orden.

Todos han sido movimientos de ajedrez que no lograron impedir un primer jaque en contra, como el de las aplastantes votaciones de la oposición en el Congreso por más fondos para el Garrahan, las universidades y las provincias.

OPORTUNIDAD UNICA: ¿PERDIDA?

En algún momento el jaque mate tuvo a disposición de Milei, pero no supo resolverlo. ¿Falta de política o de actores con capacidad política? La oportunidad que cayó en manos de Milei fue única en la historia contemporánea argentina. Un presidente con las manos libres y apoyo popular para un ajuste. En apariencia, la falla ocurrió en la segunda etapa por la búsqueda de un armado electoral nacional sectario que terminó incorporando a las filas del Gobierno a más peronistas que dirigentes ideológicamente cercanos como los de la ex Juntos por el Cambio.

Un dirigente macrista confesaba que al asumir Milei, le comentó a Mauricio Macri que cuando él lo decidiera, contaba con centenares de cuadros técnicos con experiencia, dispuestos a sumarse al Estado libertario. El ex mandatario le pidió que esperara. A los pocos meses se volvieron a cruzar, y ante la insistencia, Macri le respondió: “Olvidate, no me han pedido nada y no creo que lo hagan. Muchos funcionarios de Alberto Fernández siguieron en sus cargos.

Días atrás, el Jefe de Gabinete Guillermo Francos admitiría en una charla con Clarín, que tal vez haya sido un “error” no convocar a macristas a la gestión. Error tal vez relacionado con la idea de no cogobernar con Macri sino cooptar al PRO. Algo aún es incierto a la luz de la ruptura interna en el partido amarillo que quedó expuesta en la pelea en plena sesión en Diputados entre Alejandro Finocchiaro y Cristian Ritondo con Silvia Lospennato.

Quienes transitan la política desde hace décadas esgrimen en el inicio del 2025, tras el ajuste del año anterior, Milei tenía la mesa servida para ampliar la base política de La Libertad Avanza con sectores del PRO y de la UCR, todos pintados de violeta y consensuar con gran parte de los gobernadores y los sindicatos reformas estructurales plantando la bandera del equilibrio fiscal. Sin embargo, en soledad, Karina Milei y los Menem prefirieron el “vamos por todo” que alguna vez enarbolara Cristina Kirchner, que además del Gobierno tenía a todo el peronismo detrás.

En octubre se sabrá si salió bien o mal y si hay chances de una segunda oportunidad política. Más allá de la derrota bonaerense hay indicios que no acompañarían el éxito. Milei no estaría repitiendo los votos que obtuvo en la primera vuelta del 2023 en varias provincias del interior, pese a que parte de los votos de Juntos por el Cambio deberían ir automáticamente a LLA. Compensaría en algo, sumando a parte del electorado antikirchnerista de la Ciudad y la Provincia. Pero el volumen no le alcanzaría para recrear una ola violeta similar a aquélla ola amarilla del 2017.

Fuente: Con información de Clarín