El sector productivo termina el año como empezó: sufriendo. Ya se venía de un final de la campaña 2022 con estragos de la sequía. Hace unos meses volvieron las lluvias, pero trajeron consigo brotes de hongo negro y granizada. El golpe de gracia para la pérdida de rentabilidad se los dio el dólar blue a $1.000, con que pagan insumo, mientras que el cobro equivale a US$ 6 centavos, o $42.
Aunque la resolución 158/ 2023 del Ministerio del Agro y la Producción mejoró el anterior valor de $ 32,5 por kilo de brote de té y lo elevó a $ 42, (Ver: https://lavozdisruptiva.com/index.php/2023/11/24/el-brote-de-te-valdra-42-por-kilo/ ) para el sector productivo el balance del año es “vergonzoso y triste” por el contexto de crisis.
“Comparativamente con $42 por cada kilo de brote deberemos entregar 1.000 kilogramos de té que apenas nos alcanzará para comprar una bolsa de fertilizante de 50 kilos”, graficó un colono de Los Helechos sumamente angustiado “por el lamentable” precio, acotó.
Anteriormente por la entrega de la misma cantidad de té podían comprar dos bolsas y media y a veces hasta tres, pero con la disparada del dólar paralelo y sus precios achatados (6 centavos de dólar por kilo) será mucho menos lo que podrán adquirir por la fuerte suba en los insumos.
Fuentes del sector productivo se mostraron nuevamente angustiadas, ya que el pedido generalizado, en vista de un dólar agro a $614 prontos a liquidar, se pretendía no menos de $55 por kilo, pero se quedaron $13 por debajo de sus pretensiones y hasta más de $200 respecto al valor del nuevo dólar agro.
La cosa ya arrancó bastante mal con la seca que afectó a todos los productores el verano pasado, en medio de la cual tuvieron que soportar escasez de combustible, suba de costos, cepo y un pésimo valor (constante) por el producto.
Esta primavera, con la llegada de las lluvias podían haber levantado cabeza, pero la intensidad del fenómeno meteorológico hizo mella en los teales, algunos de ellos inundados por el brote de vertientes y otros lotes afectados por el avance del hongo negro. En paralelo, se tuvo que parar la cosecha y cuando sí podían sacarla, los caminos vecinales estaban (y siguen) intransitables.
Como efecto colateral, en los secaderos falta chip para secar el producto. Ahora, como golpe de gracia, se terminó de abonar el malestar: con el dólar agro a $614 se esperaba abrir una negociación en la Comisión Provincial del Té (CoProTé) para fijar el kilo a $55, pero no hubo chances y se tendrán que conformar, por ahora, con $42.
Fuente: Primera Edición/ Medios digitales
